jueves, 10 de junio de 2010

La zorra y las uvas


Seguro conocen la fábula de la zorra y las uvas. Era una zorra a la que, por alguna razón, se le metió la idea de comer uvas y empezó a saltar y saltar para alcanzar un racimo. Pero a pesar de sus esfuerzos, no consiguió las uvas y se alejó diciendo “bah, están verdes!”.


Yo conozco una zorra muy parecida a la de la fábula, sólo que más humana. Se llama Emiliano, pero algunas personas le dicen la yarará (una serpiente típica de Córdoba).

Resulta que esta zorra de la yarará, con todo su veneno y escamas, también tiene corazón. Y la muy boluda se enamoró de (o, más bien, se hipercalentó con) un chongo hermoso que obviamente no le va a dar bola nunca porque Emilianito no se distingue ni por su belleza, ni por su flacura, ni por la blancura de sus dientes (lo cual es lo peor).


El chongo en cuestión se llama Oscar. Es un tipo super educado, profesional, con un lomazo tremendo y una personalidad muy simpática. La cuestión es que Emiliano/zorra/yarará se volvió super denso, acosándolo todas las noches que lo veía en el boliche, hasta que una noche Oscarcito se hartó y lo mandó a la mierda.


¡Para qué!


Nunca, nunca, nunca manden a la mierda a una loca venenosa. Es como hacer enojar a una yarará.


La zorra Emi no vino a decirnos: “está verde”, dijo simplemente, en todas partes donde pudo:“la Oscar es una pasiva de cuarta”.

Y dijo muchas cosas más, claro. Hasta donde le dió la imaginación.


Es una forma muy extraña de enfrentar la realidad. No logra probar cómo es la realidad entonces inventa otra que lo consuela. Por más que sabe que se está mintiendo, se sigue mintiendo. Pero lo increíble es que realmente se cree su propia mentira.


Porque lo importante acá no es que Emizorra haya difundido chismes a diestra y siniestra diciendo que el tal Oscar tenía sida y robaba billeteras. Lo importante es que Emizorra se autoconvenció de que era así.


Y está lleno de Emizorras en todas partes. Las veces que habré entrado a algún chat y por no contestar un mensaje choto o proveniente de una foto horrenda me dijeron de todo después.


Me acuerdo una vez, patente, me escribió un tipo, empecé a contestarle y recibí de golpe otro mensaje de él “chau, sos una loca pasiva asquerosa”. Puede que haya sido un acostumbrado a las conexiones rápidas, pero creo que más bien era una zorra histérica con muy poca paciencia.


Y supongo que aún hoy seguirá creyendo que soy una pasiva asquerosa.


¿Cómo hace esta gente para lograr ese maravilloso autoconvencimiento?


Porque no vamos a negar que si uno pudiera autoconvencerse de que las cosas son como uno quiere, la vida sería mucho más linda.


Y lo más interesante es la reacción de la gente. Porque nadie le cree, todos sabemos que la Emi quedó resentida porque no la quisieron coger. Pero nadie dice nada nunca sobre el tema, sólo se quedan calladitos escuchando las locuras que Emi inventa sobre Oscar. Es como que se le permite mentirse, pero nadie se prende con él.


Pero claro, yo soy medio yarará también y resulta que una noche estaba apoyado en la barra del boliche con bastante alcohol encima y se me vino la yarará a contarme sus nuevos inventos sobre Oscar. Más que nada por hartazgo del tema le dije:”Mirá, la cosa no es así. El guaso te dijo que no tenía onda y vos ahí te pusiste a hablar mal de él. Y ahora ya fue, entendé. Todo el mundo sabe que mentís.Ya sos patético inventando boludeces todo el tiempo. Hartaste.”.


Quedó muda, claro.


Hasta ahora no se ha vengado de mí, que yo sepa.


La cuestión es que a todos nos cuesta tolerar el rechazo, pero hacer lo que hizo la zorra de la fábula es peor. Porque terminás demostrando que sos un loser total y encima no te lo bancás.

Lo mejor es retirarse con la dignidad que nos quede.


Bueno, ya que me puse moralista, permitan que este pobre blog les deje algo: Locas (y no locas), cuando alguien los rechace piensen que ellos son los boludos que se pierden estar con ustedes, que son maravillosas y hermosas. Y nunca, nunca, nunca digan “es una pasiva de cuarta!”, porque las que van a quedar como pasivas de cuarta son ustedes mismas.

13 comentarios:

  1. Obvio! Lo mejor cuando te dejan es armarse un blog donde poder explayar todas las mierdas que se te ocurran, escribir lágrimas y contar en detalle todos los altibajos por los que se pasa durante el estado pos ruptura. Siempre va a haber algún blogger copado que te lea y que para que le comentes después en su blog, te diga algo que te levante un poco el ánimo. Pero eso de difamar a alguien porque nos quiso, es una truchada y habla muy mal de uno.
    Igual mirá que sos arriesgada vos, ehhh la venganza puede llegar a ser terriiiiiiiiiibleeeeeee!
    Besos (procurá no desaparecer por otros 3 meses, se agradece :p )

    ResponderEliminar
  2. Es simpatico saber que no sólo en mi paisitico existen locas loser que no logran aceptar que la maravilla de la que están autoconvencidas que son, en realidad no es tan agradable para todo el mundo y que además si uno es un mae feo y poco culto que no gusta ni al promedio entonces nadie está en obligación de aceptarnos como amantes, novios o lo que sea.
    Es que es bueno verse al espejo de vez en cuando con ojos objetivos y críticos.

    Saludos machito.

    Pd: en mi país le decimos machos a los rubios.

    ResponderEliminar
  3. TOOOOTALMENTE DE ACUERDO!!!!!

    recuerdo que una vez empece a conocer, a un pibe yarar asi... y menos mas que solo fue conocer, porque cuando le corte el rostro me trato de lo peor, de nefasto, mentiroso, egocentrico y tantas barbaridades... que ya ni me acuerdo...

    es simple como vos lo decis... sinos cortan el rostro, y no queriamos, bue, va a doler un poco quizas, pero el problema es efectivamente de eso, de que se perdieron al oportunidad de conocer a alguien maravilloso como nosotros jajaja... algo similar puse en mi ultimo post...

    un ABRAZOOOO

    ResponderEliminar
  4. rubio hace bastante q no escribias... bah por lo menos tenes algo q contar, yo ni eso jaa. cuidate

    ResponderEliminar
  5. Me gusta tu costado moralista, te hace ver mas humana (jajajajja) pero es así, no hay nada peor que no asimilar el rechazo. Pasa que la mayoría se quiere tan poco que necesita que un tercero le diga "estas hermoso/a"
    Que bueno tenerte de vuelta, a ver si te tomas menos vacaciones!

    ResponderEliminar
  6. Si, el rechazo es feo... pero uno propone y el otro dispone. Hay que asumir las reglas del juego

    ResponderEliminar
  7. Cuando querés sos malo-malo ... Me pregunto que habrá desatado tal ira. Y bueno, ahora que ya le tiraste a la yarará el balde de agua fría, cuidate porque o la tenés de guardaespaldas o al acecho...

    Me sumo al pedido general; no al abandono de los/as lectores/as, sí a las actualizaciones...

    Saludos

    ResponderEliminar
  8. Volviste zorra.

    Seguro anduviste comiendo uvas.

    ResponderEliminar
  9. Jaaa! Lo tuyo es una verdadera apelacion al Sentido Comun!!!!
    Me alegra tu retorno!!!
    Espero pronto que nos des tu punto de vista sobre tus/o las locuras de tus amigos locas!!!
    Porque entre nosotros, no creo que se hayan vuelto muy cuerdas!!!

    ResponderEliminar
  10. Mi taradísimo amigo... la uva más escasa de esta comarca, cuánto me alegra volver a verte.

    Creo que nos sintonizamos: habla peor, de uno el hablar mal del otro, que del otro. Y digamos que a tu azorrada víbora no le quedaron muchas opciones, aunque claro, también pudo haber fingido que tenía cáncer para despertar lástima en el objeto de sus deseos, a ver cómo le iba con esa estrategia... sé por experiencia que a muchas zorras de Medellín les ha funcionado a las mil maravillas la estrategia para encamarse a las carnes más suculentas del área circundante.

    Un abrazote.

    ResponderEliminar
  11. Una historia genial... con atisbos realmente convincentes...!!! fantástica también la moraleja...!!! jaaaaaaaa... chauuuuuuuuu...!!!

    ResponderEliminar
  12. Me encantó este relato de la vida real... jejeje... Nunca me ha pasado, pero sé que hay gente así de víbora...
    saludos !!!

    ResponderEliminar
  13. Chevere el post...hacer ratico no pasaba por aqui...
    NOs leemos luego.

    ResponderEliminar