martes, 18 de noviembre de 2008

Entre el orgullo y la verguenza


Toy harto de escuchar/leer a las locas decir "no tengo porqué estar orgulloso de ser gay", "no tengo porqué sentirme representado por una peluca de plumas", "no tengo porqué identificarme con un travesti, un drag, etc".

Parecen curas de parroquia de campo poniendo grito en el cielo porque vieron una teta sin querer. "La marcha del orgullo es una depravación total" dicen con el tono de una señora de Recoleta, como si tomar esa postura fuera más "masculino" que ponerse una peluca y salir a bailar sobre un carro.

Obviamente, no por ser gay uno tiene que sentirse identificado con la idea del orgullo. Pero ¿porqué esa necesidad de las locas de atacarse entre sí? ¿Porqué el gay "tranquilo", "tapado", no puede hacerse un lado y dejar que los gays "plumíferos" y "alocados" salgan a caderear en la marcha? ¿Porqué ese gay tan educado, tranqui y supuestemente "masculino" tiene que opinar mordazmente con más veneno que una vieja cuerera de barrio y tirar bosta sobre los gays que opinan o actúan diferente?

Se hacen los "tranquis" y los "buena persona" pero, si pueden, destilan veneno desde donde puedan: conversaciones formales o informales, artículos periodísticos, la radio, la tele, la internet, etc.

Y es que en este mundo, impregnado por la homofobia, los gays tenemos dos opciones extremas con una posición intermedia:

1) Ocultar totalmente la homosexualidad y fingir que uno es heterosexual. Yo intuyo que deben haber miles y miles de gays que hacen esto: fingen ser heteros en todas partes, hasta se casan y tienen hijos pero, todas las veces que pueden, se van a algún lugar oscuro y privado y se comen todas las pijas que pueden sin que nadie se entere (ejemplo de este tipo de loca es Ted Haggard, pastor cristiano evangélico en Estados Unidos que vivía condenando a los homosexuales y tuvo la mala pata de ser denunciado por el taxiboy con el que se pajeaba en la oscuridad de moteles baratos).

2) Vivir la homosexualidad de manera más o menos abierta en ambientes que lo permitan y entre personas que lo toleren. Esta opción sólo es posible en algunos lugares del mundo, principalmente las grandes ciudades y no de todos los países. Los gays iraníes o los chinos, por ejemplo, no tienen esta opción. A los gays estadounidenses, argentinos, mexicanos, españoles, etc, que viven en pueblos chicos, tampoco les resulta fácil.

3) Vivirla de manera totalmente abierta, es decir, no sólo aceptando la condición de ser homosexual sino adoptando una postura combativa ante una sociedad que nos quiere convencer de que la homosexualidad es un mal o una enfermedad. La marcha del orgullo gay surgió precisamente por y para eso: en respuesta a los maltratos que sufrían los gays por parte de la policía neoyorquina y luego se extendió como una protesta a la sociedad en general y a escala mundial (al menos en Occidente).

Es cierto que mucha gente va a las marchas del orgullo sólo a mostrarse o a divertirse pero hay que tener en cuenta que la marcha puede ser un instrumento útil para luchar contra los prejuicios sexuales y para "minorías" que no encuentran espacios de expresión en otras áreas.

Por eso, creo que muchos gays que se cubren de plumas y salen a loquear a la calle, sea en la marcha o no, están tomando una postura de lucha que me parece respetable, independientemente de las retrógradas reacciones de asco o repulsión que generan en algunas mentes que, a veces, no pueden ver más allá de su nariz ni escapar de un razonamiento homofóbico que les han inculcado de niños desde todas partes.

Siempre es más fácil no pensar, no ponerse en el lugar del otro y criticar gratuitamente. Es hasta divertido, como diría Homero Simpson. Las locas closeteras que critican a las locas destapadas se sienten quizás más "masculinas" o más "moralmente aceptables"
El problema es que, al criticar esas acciones, los gays trabajan contra sí mismos, ya que atacan y desprestigian a los mismos movimientos y a la misma gente que lucha por lograr que su país no sea como Irán, la India o Nigeria, donde los gays pueden ser llevados a cumplir cadenas perpetuas o penas de muerte.

Abran los ojos, chicas. Estar en el closet y viborear contra las demás locas no las convierte en chongos rugbiers masculinos. Quédense tragando pijas en la oscuridad si quieren y les gusta, pero al menos dejen que los que tienen ganas de luchar por un mundo mejor y más justo, para ellos y para ustedes, trabajen en paz sin tener que soportar sus comentarios de mierda de "ay, esas locas que van a la marcha son un asco".

11 comentarios:

  1. Estamos completamente de acuerdo. Creo que merecen particular atención aquellos personajes que caen en la contradicción de no quererse convertir en estereotipos, pero al mismo tiempo, hablando de la marcha, y yéndose lanza en ristre contra ella quedan como el peor de todos: el de la marica resentida y amargada.

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  2. encerio por que entre ustedes se viven peleando?, a mi me encantan los gays que defilan con orgullo en las marchas, y me parece que tiene todo el derecho si hay ptros que no les gusta que se aguanten!

    :p

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  4. La verdad es que no tengo contacto con lokas, ni con esas marchas, ni con nada relacionado, pero viéndolo desde afuera, siendo totalmente ajena a la cuestión, este tipo de marchas me parecen una pelotudez. Capaz estoy diciendo flor de pavada, pero creo que muchas veces no es que se los discrimine a los homosexuales, los judíos o los negros, se auto discriminan solos al nucleares y ponerse en la postura de “el mundo está contra mi”. Entiendo que hay un sector social sumamente estructurado, cerrado y limitado en su manera de pensar que no los va a aceptar bajo ningún punto de vista, pero pienso que afortunadamente estamos evolucionando mucho gran parte de la sociedad y se los comprende y acepta cada vez más. Me parece de mucho más peso, una pareja que camina agarrada de la mano por la calle o se dan un beso en público, bancándose las miradas y las incomodidades de muchos de los que se cruzan. Para mi esa es una forma de imponer su condición y reclamar sus derechos mucho más jugada y productiva, que una marcha a la cual, muchos de los que somos ajenos a la misma, no le damos bola.

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  5. Lulu, toy de acuerdo con vos...yo también creo que una pareja que se besa en público es mucho más combativa que una loca que va a la marcha.

    De hecho, detesto todo tipo de marchas.

    La marcha en sí puede ser muy criticable y tener muchas puntos en contra, al igual que la gente que va a ellas.

    A lo que voy es que no porque no te guste la marcha o no estés de acuerdo con ella tenés que ponerte a hablar pestes venenosas de la gente que sí va. Creo que si alguien tiene ganas de criticar la marcha o lo que sea mejor que lo haga con argumentos coherentes y de manera educada...de otra forma, como decía Milo más arriba, la crítica parece venir de alguien amargado y resentido.

    En lo que no estoy de acuerdo con vos es en que los gays se autodiscriminen. No por juntarse a marchar, o ir a un boliche sólo para gays o lo que sea, los gays nos estamos autodiscriminando. Son espacios que buscamos para expresar visiones o metas en común o simplemente para conocer gente con gustos parecidos. De hecho, ni la marcha ni el boliche están cerrados para los heterosexuales y hay muchos que van a acompañar, a apoyar (en todo sentido :P) o a divertirse. Si fueran espacios a los que sólo entran gays, quizás podríamos decir que nos autodscriminamos, pero no es así. Si uno lo piensa, prácticamente no hay espacios "exclusivos" para gays, salvando quizás algún sauna.

    La discriminación parte de la sociedad: la encontrás en la familia, en la escuela, en la iglesia, en el club, en el kiosco, en la verdulería, etc.
    No se puede negar que hay una situación real de injusticia social e intolerancia contra los gays y ese argumento de "el mundo contra mí" me parece peligroso porque es muy usado para atacar a la gente que intenta defenderse de o atacar a la discriminación.

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  6. uy! siento un acento de molestia y rabia en tu comentario. Dejala ir, es siempre mucho mejor.

    Un beso desde el rincón o en el rincón.

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  7. Muy bueno tu blog, mas alla de no estar de acuerdo con vos casi nunca, me gusta como escribis
    segui asi uqe me divertis mucho

    Ale

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  8. Mi apreciado blondie: Estoy totalmente de acuerdo contigo y como dije en un post antiguo: "si no le gusta el tipo de gente que va a las marchas entonces llenela con sus amigos y así habrá mas "gente como usted".

    Un abrazo

    Quike

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  9. A veces siento que el discurso de la "autodiscriminación" se parece demasiado a la teoría de los dos demonios. Hagámonos cargo de una vez por todas que SÍ DISCRIMINAMOS, y si no nos bancamos eso, entonces hagamos algo para cambiarlo. No hay autodiscriminación, hay discriminación, y si no, que levante la mano el que no escuchó de boca de alguien el "qué asco" al ver dos hombres o dos mujeres besándose.}
    Lo que también creo es que la gente en la calle ha logrado cosas. Tal vez en estos tiempos de internet y espacios virtuales ya nos parezca raro ver gente mostrarse tal cual es en la calle: mariposas, drags, pobres, estafados... siempre alguno de ellos toma las calles, y está bien. Dejar el mundo virtual y mostrarnos como somos más allá del "qué dirán" es un gran paso adelante.

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  10. flaco sos un grossoooooooo jajajj me encanta como escribis, nunca vi tantas verdades juntas!!!!!!!


    te felicito!

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