sábado, 1 de noviembre de 2008

Zodíaco Gay


Desde que fue inventada hace milenios (seguramente por alguna loca que se la pasaba mirando las estrellas), la Astrología ha estado impregnada de una incomprensible homofobia responsable de que, hasta el día de hoy, se carezca de una clasificación de los signos zodiacales teniendo en cuenta su orientación sexual. Los astrólogos, cuando no están drogados, nos hablan de “el hombre de aries”, “la mujer de libra”, “el varón de cáncer y su relación con el sexo opuesto”, etc…¿Y qué pasa con las locas??? ¿Es que no tenemos derecho a creer en las mismas boludeces que los heterosexuales???


Existen, claro, alguna páginas en internet sobre astrología que incluyen algún apartado para los homosexuales...aunque me pregunto en qué libro/escuela/astrólogo se basarán para hablar con autoridad de la "astrología homosexual".


Pero bueno, ya que en Internet es gratis publicar, esta es mi clasificación astrológica sobre las locas basada en mis tenues conocimientos de la ciencia de las estrellas y de haber anotado siempre los signos de todas las locas con las que estuve.


Loca Aries


Todos hemos sido encarados alguna vez por una loca ariana…y si no, lo seremos algún día. La loca nativa de este signo nunca se anda con medias tintas, cuando está caliente y/o ve a alguien que le gusta, va y se lo dice de frente, esperando que el otro reaccione automáticamente diciendo “ok, vamos a la cama”. Pero lo peor de todo es que ella espera que todos se comporten así, brutales y directos, por lo que siempre anda frustrada por el histeriqueo de “las locas vuelteras”.

La ariana no conoce lo que es tener tacto, por lo que si creés que no le vas a gustar y andás mal de autoestima mejor no la encarés, porque te va a decir sin pelos en la lengua que le parecés horrenda y hasta te va a enumerar todos los defectos físicos, espirituales y socioeconómicos que ella nota en vos y por los cuales te rechaza. Es seguramente la loca más sincera del zodíaco, pero esto no significa que sea buena persona, sino que carece de imaginación: el arte de la seducción es un libro cerrado para la loca ariana, a quien le disgusta enormemente perder tiempo (también es muy común que le disgusten el arte y los libros). Pero bueno, no vayan a creer que las arianas no son románticas, aunque sus frases más “poéticas” nunca pasarán del nivel de las letras de Ricky Martin o Chayanne (y probablemente, sean copiadas de sus discos).

Todas sus acciones tienen un objetivo claro. Si sale de su casa, es porque tiene algo que hacer; jamás la veremos dar vueltas sin sentido…ni siquiera en el parque. Ella camina directamente hacia un lugar y si se tropieza con alguien que le gusta, probablemente le pida el teléfono y siga su camino. Tampoco es fácil encontrarla en conferencias, bibliotecas, museos, templos ni nada parecido. A la loca de aries no le gusta pensar mucho y detesta el silencio. En cambio, ama las luces y el estrépito y los lugares que explotan de gente. Es fácil reconocerla en un boliche: si no está bailando en el caño o en alguna tarima, está en medio de la pista, con su cabello teñido de algún tono chillón (casi siempre amarillo o rojo, los colores de Marte, su planeta regente) y siempre con lentes oscuros y musculosa apretadita, tenga lindos bíceps para mostrar o no.

Hay que aclarar que ésto no quiere decir que sean afeminadas o anden soltando plumas a cada paso sino que la fogosa influencia de Marte las empuja a hacerse ver en dónde sea que estén. El planeta rojo simboliza a la guerra, por lo que no hay loca más peleadora que una ariana. Siempre está peleada o peleando con alguien, sea el novio, la madre, la mejor amiga, el vecino, el kiosquero, su mascota, etc. Suele tener enemigas/os y gente que la detesta en todas partes, pero es que ella no puede con su naturaleza caprina. Le gusta chocar y decir las cosas tal como son y las siente…y así le va. No es que la pase mal, tampoco, porque en general siempre se sale con la suya ya que nunca pierde fuerzas para pelear un poco más. Además, es muy trabajadora, por no decir escaladora. Siempre está en actividad física, pocas veces la veremos razonando.

En cuanto al sexo, será siempre activa, incluso cuando sea pasivas es decir, que difícilmente se quede quietasen la cama. Esto puede ser muy lindo al principio pero con el tiempo puede volverse extenuante y, sobre todo, aburrido ya que tampoco le gusta pensar en la cama y raramente variará las poses. Pero tampoco esto es un problema porque sus relaciones nunca duran mucho tiempo debido a que sus parejas siempre sospechan que anda con otros (y probablemente estén en lo cierto). Su mayor enemigo es la eyaculación precoz, ya que en su impulsivo afán de aprovechar el tiempo, creen que 5 minutos de sexo es demasiado para una encamada.

En resumen, las arianas están diseñadas para llamar la atención, por más que estén haciendo el ridículo. Si tienen buen gusto, suelen llevar su imagen mejor que nadie y ser inolvidables, pero casi siempre necesitan de alguien más centrado que les diga, por su bien: “loca, se te fue la mano con el rimel!”.


Loca Tauro


Es difícil cruzarse con una taurina porque, por lo general, se pasan la vida dentro de su casa. Si por casualidad ves que una tauro sale de su casa un sábado por la noche, que no te extrañe, seguramente está yendo a alquilar una película para ver en la cama antes de dormir. Son esas locas hogareñas que viven con el Cif en una mano y la escoba en la otra y que pasan más tiempo limpiando, acomodando, y pensando qué nuevo adornito comprar para la mesita del living que teniendo sexo. Esto, claro, si es que tiene plata y casa propia, elementos vitales para las taurinas, ya que son las más materialistas del zodíaco. Por supuesto que ésto no siempre es un defecto, porque estar en pareja con una loca tauro puede simplificarte la vida. Si te metés con una tora, siempre tendrás quien te haga las compras, cocine, lave, planche, bañe, vista, peine, etc y todo sin desperdiciar ni medio centavo. Pero ojo, que no lo hacen por amor sino porque, son imbancablemente posesivas, metidas y celosas. Cuidado con meterle los cuernos a una torita, porque las tauro son más vengativas que un yankee después del 11S.

Ni olvidan ni perdonan y son capaces de esperar años y años para ajustar cuentas, pero jamás dejan de hacerlo. Además, tienen una capacidad asombrosa para trabajar en las sombras y llevar a cabo sus planes sin que nadie se entere. Es decir, son bien hijas de puta, así que mejor tenélas siempre de amigas y no les hagás nada ni por accidente.

Su vocación más fuerte es la de ama de casa, pero como les gusta tanto la plata, seguro que también trabajarán “de verdad” o harán trabajar “de verdad” a su pareja. Incluso si tienen personal doméstico, no dejan de fijarse que todo esté brillando y bien puesto y, sobre todo, que nada se desperdicie, sea dinero o gotas de detergente. Generalmente, son odiadas por empleadas domésticas y/o públicas, mozos de restaurants, guías turísticos, vendedores de ropa, arquitectos, decoradores, etc. ya que siempre se las arreglan para encontrar algo mal hecho. Son capaces de pedir diez veces el mismo plato hasta que se lo traigan como tiene que ser, y ésa es otra razón por la que son tan caseras, ya que nadie quiere salir con ella y estar bancándose papelones en lugares públicos.

A pesar de ser ahorrativas, no son avaras…les gusta gastar plata, salir al shopping y consumir como a cualquier otra loca hija de vecino. Son adictas a la página Amazon, que les permite comprar desde su casa. Eso sí, jamás gastarán más de lo necesario y no les importará mucho si usarán o no lo que se compran. Sólo les interesa tenerlo en su poder. Aunque difícilmente te refrieguen en la cara “lo que se compraron”, se asegurarán de que te enterés de que “lo tienen”. Sufren de “falsa humildad”, digamos.

En la cama, las taurinas se inclinan a ser pasivas, ya que, como en todo, prefieren recibir antes que dar. Si están muy desesperadas, pueden aflojar un poco y ser versátiles (al menos están dando para recibir algo a cambio) pero difícilmente sean sólo activas. Y si lo son, que no te quepa la duda que algo a cambio te pedirán (aunque sea en metálico).

Como la firmeza y la dureza son naturales cualidades del toro, las locas de este signo suelen estar en pareja durante años, por lo cual también tienen bien ganados los naturales cuernos del toro, ya que sus parejas suelen estar tan asfixiadas que se echan una cana al aire al menos 3 veces por semana. A menos que se trate de una tora juguetona y fiestera que arme tríos de vez en cuando (un tipo muy raro entre las tauro), lo más probable es que los cuernos le terminen llegando a Venus, su planeta regente.

Así son las Tauro…quedadas, pasivas y judías como ellas solas. Como Venus las rige, suelen ser lindas y sexys, pero viven en constante lucha contra su peor enemigo: la comida a domicilio que, combinada con su terrenal amor por el sedentarismo, las arrastra invariablemente a la obesidad y la consiguiente depresión (aunque siempre les dolerá más el precio de las pizzas y los lomitos que parecer más vacas que toras).




Loca Géminis


Si ya conociste a una loca geminiana, ya sabrás lo insoportables que son. Hay quien dice que los gays son muy charlatanes y lengua suelta (seguramente, alguien que probó esas lenguas) pero las locas de géminis suelen tener una lengua con vida propia. No paran de hablar ni cuando habla otra persona y no es que no escuchen o dialoguen sino que muchas veces hablan también por los demás. Es muy típico que te digan “Hola, ¿cómo andás? ¿Bien? ¿O mal? Tenés otro colorcito en la cara ¿Estás mejor que la otra vez? Sí, te veo re lindo ¿Vamos a la cama? ¿O cogemos acá parados? Decidí vos, ya sabés que a mí me da lo mismo ¿Trajiste forros? Tengo unos mentolados...” y así siguen todo el tiempo, hasta que te dicen “chau” sin que vos hayas dicho ni “mu”.

Nada detiene su verborragia, ni siquiera el sexo oral. Tienen incluso la asombrosa capacidad de mamársela a más de uno por vez mientras cuentan cómo les fue el domingo pasado en la comunión de la sobrina. ¡Y encima se les entiende cada palabra! Esto es así porque Mercurio, el planeta que las rige, simboliza la comunicación, la sociabilización y la velocidad y es por eso también que suelen ser rapidísimas para llegar a los bifes (además de que suelen inspirar grandes deseos de meterles algo en la boca para ver si se callan un poco)

Llegados a este punto, hay que aclarar que Géminis es el signo de la dualidad y la versatilidad por excelencia. Mercurio empuja siempre a las geminianas a probar todos los extremos, todo lo nuevo y extraño, para expandir constantemente sus horizontes. Sin embargo, esto tampoco es ninguna garantía y probablemente te encuentres con geminianas absolutamente pasivas. ¡Ni siquiera la influencia versatilizadora de Mercurio puede con la pasividad de algunas locas! Te advertimos también que no conviene enamorarse mucho de una geminiana, ya que debido a la mencionada naturaleza sociable del signo, raramente querrá estar con una sola persona todo el tiempo y, mucho menos, toda su vida (en eso sí se deja influir por Mercurio, claro).

Si alguna vez participás de un trío, o mejor, de una orgía, probablemente encuentres una o más geminianas ahí, ya que también en eso son muy amplias y abiertas. Lo que sí, hay que reconocerle que sus amistades son variadas y gusta relacionarse con todo tipo de gente que, sobre todo, hagan cosas diferentes. En su agenda puede tener números de peones de albañiles, remiseros truchos, limpiavidrios, cadetes de policía, vendedores de diarios, algún estudiante crónico de ciencias económicas o psicología y hasta nada menos que tu número. Algunos pueden llegar a considerarla como una vulgar “alzada”, cosa que la ofende mucho ya que ella siente que constantemente está eligiendo y seleccionando con quién meterse en la cama y con quién no. El problema es que jamás descarta definitivamente a nadie porque sabe que las personas pueden cambiar con el tiempo. Es decir, en algún futuro ella estará más vieja y no podrá elegir tanto, por lo que guarda teléfonos con un espíritu previsor mercurianamente empresarial.

Para terminar, diremos que Mercurio simboliza también al comercio, la astucia, la estafa y el robo liso y llano, por lo que si una geminiana te cuenta que vende dvds o perfumes importados, aseguráte que tenés todavía la billetera en el bolsillo y despedíte en cuanto puedas. Y en el caso de que esté demasiado linda como para dejarla pasar ni se te ocurra llevarla a tu casa y mucho menos ir a la de ella. Vayan a un hotel con cámara de vigilancia y comprá puntycrem para que crea que sos pobre. Sino, es capaz de seguirte a tu casa para robarte en la puerta.


Loca Cáncer


Las cancerianas son algo difíciles de comprender ya que están regidas por la Luna, astro que continuamente está cambiando de cara, como si de una cirugía plástica mal hecha se tratase. Pero no piensen por esto que las cancerianas son esas locas que andan operándose la caripela cada 6 meses. La influencia lunática es sobre el ánimo más que sobre el físico, por lo que las cangrejitas suelen sufrir de una vertiginosa ciclotimia emocional. En un momento son todo amor y cariño y al siguiente echan fuego por la boca. Son capaces de levantar la voz de repente puteando como india desatada, al parecer sin causa alguna (ésto les pega flor de julepe a los que la rodean ya que por lo general son calladitas y tímidas). Además, nunca nadie entiende muy bien porqué se enojan. Es común que la pareja de una loca canceriana duerma, desterrada, en el sofá noche por medio o tenga que ir y venir de la casa de la madre, trayendo y llevando ropas, muebles, osos de peluche y cartas de amor. De vez en cuando, la canceriana escribe notas de suicidio o hace conmovedoras escenas de despedida como si fuera a arrojarse debajo de un tren al más puro estilo “La Jaula De Las Locas”. Pero lo más irritante de todo es que para ella es normal comportarse así. Al parecer, no mide nunca el peso de las palabras que utiliza, por lo que cuando creas que estás peleado a muerte con una canceriana después de que te insultó a tu vieja, a tu abuela y a tu raza entera sin saber muy bien porqué, no te sorprendas al recibir una llamada de ella en la que muy alegremente te diga: “¿Qué hacemos hoy? ¡Te super-extraño, gordito!”.

Es fácil darse cuenta que una loca es de cáncer con sólo verla, porque tiene cara de persona soñadora e introvertida, o sea, de boluda. Siempre anda caminando por ahí sin rumbo ni sentido. A veces parece que está shirando muy disimuladamente pero lo cierto es que va por la calle pensando en cualquier pelotudez o hablando sola en voz alta mientras los autos le pasan rozando y las puteadas le llueven sin que se dé cuenta nunca. La loca de cáncer siempre queda mal con todo el mundo porque jamás te saluda si te ve por ahí, pero no porque no te recuerde sino porque, en vez de ver lo que la rodea, está soñando que es una famosa estrella hollywoodense que hace obras de caridad en África o una ladilla rosada que vive en el vello púbico del chongo que le gusta. Imaginación no le falta, por lo que nunca confíes en nada de lo que te diga. No es que la canceriana sea una mentirosa descarada, pero si ve un auto chocado en la calle, llega a tu casa y te cuenta toda la historia del choque, que resulta ser un apasionante relato basado en varias telenovelas latinoamericanas que alguna vez vió, sólo que más irreal. Pero es más cuentera cuando se trata de su tema favorito: su salud. Para ella, cualquier minúscula manchita es un incurable cáncer de piel y es probable que esa apariencia de soñadora boludona se deba en realidad a los kilos de pastillas y remedios que consume a diario.

Y bueno, ¿Qué se puede esperar en la cama de una canceriana? Todos sabemos que los cangrejos caminan hacia atrás, lo cual convierte a Cáncer en el signo más pasivo del zodíaco. Al igual que Aries, se manda de frente, sólo que con el otro lado de su cuerpo. Pero cuidado que también existen las cancerianas activas y no son difíciles de encontrar, o más bien, de crear, ya que es muy fácil convencerlas de cualquier cosa. Así como inventan los cuentos más disparatados, también se los creen. Son crédulas, sumisas y sugestionables, por lo que si le decís un par de veces al oído “metémela, metémela”, es muy probable que te la meta. El problema es que si después la querés volver pasiva, vas a tener que inventar otra cosa. Pero claro ¿para qué la querrías volver pasiva?

Así se completa el perfil de las cancerianas: Ciclotímicas, distraídas y noveleras, a lo cual hay que añadir su principal característica: la hiper-sensiblidad. A veces, un “hola, cómo andas” dicho muy fuerte puede hacerlas llorar mares y empujarlas a tomar cianuro, así que cuidado con cómo las tratás, que son mariconas pero en serio.

5 comentarios:

  1. Que lástima que no tuviste nunca un novio libra, me quedé sin saber que pasa con nosotros!

    :-(

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  2. Ey, yo soy de Leo. Quiero mi horóscopo gay!!

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  3. You soy aries. Casi todo acertado. Y gracias por el tip del rimel!

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  4. Y es que le estás haciendo competencia a la Mercado que estás lanzando tus conocimientos astrológicos por este medio?... pero además, muy, muy, muy acertado, con la salvedad de que un servidor es un tauro callejero.. . ¿será por el ascendiente?

    Aquí sigo.

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  5. Jajaja... Acá un activo de cáncer. ¡Pero imposible de voltear!

    Este blog está muy bueno...

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